01 -
Déjalo en reposo hasta que esté completamente frío y firme antes de cortarlo.
02 -
Cubre tu molde cuadrado de 8 pulgadas con papel encerado o pergamino y rocíalo ligeramente con aceite.
03 -
Mezcla el azúcar, la leche y la mantequilla en tu cacerola y caliéntalos hasta que hiervan a fuego medio-alto.
04 -
Retira del fuego la cacerola y añade el colorante amarillo si prefieres.
05 -
Añade el chocolate blanco y mezcla hasta que todo quede bien derretido.
06 -
Déjalo hervir exactamente 5 minutos sin tocarlo, nada de revolver.
07 -
Añade el jugo y la ralladura de limón al instante.
08 -
Vierte todo rápido en el molde y alisa la parte superior.
09 -
Pon el azúcar en tu procesador de alimentos y dale unos 30 segundos para que esté bien fino.