Burritos Papas Queso (Versión para Imprimir)

# Ingredientes:

→ Para el Relleno

01 - 500 gramos de carne molida (puedes usar pavo molido o una alternativa a base de plantas)
02 - 2 tazas de croquetas de papa congeladas
03 - 1 taza de queso cheddar rallado
04 - 1 taza de queso oaxaca rallado (sustituyendo Monterey Jack)
05 - 1/2 taza de crema ácida
06 - 1/4 taza de salsa chipotle (puedes regular la cantidad según el picante deseado)
07 - Sal y pimienta al gusto

→ Para Armar

08 - 6 tortillas de harina grandes

→ Toppings Opcionales

09 - Tomates picados
10 - Cebollitas verdes picadas
11 - Cilantro fresco
12 - Más crema ácida
13 - Más salsa chipotle

# Instrucciones:

01 - Precalienta el horno y cocina las croquetas de papa siguiendo las instrucciones del paquete hasta que estén doradas y crujientes.
02 - En un sartén caliente a fuego medio, cocina la carne molida hasta que esté bien dorada. Sazona con sal y pimienta. Escurre el exceso de grasa.
03 - En un recipiente grande, mezcla la carne cocida con las croquetas trituradas ligeramente, la mitad del queso cheddar y la mitad del queso oaxaca. Revuelve bien hasta integrar.
04 - Calienta las tortillas de harina unos segundos en un sartén o en el microondas para que estén suaves y se puedan doblar fácilmente.
05 - Coloca una porción generosa del relleno en el centro de cada tortilla. Rocía un poco de salsa chipotle encima y añade una cucharadita de crema ácida.
06 - Dobla los lados de la tortilla hacia adentro, luego enrolla desde abajo para formar un burrito compacto.
07 - Pon los burritos armados en un refractario y espolvorea el resto de los quesos sobre ellos. Hornéalos de 5 a 10 minutos hasta que el queso se derrita y burbujee.
08 - Saca los burritos del horno. Agrega los toppings opcionales como tomates picados, cebollitas verdes y cilantro. Acompaña con más crema y salsa chipotle al gusto.

# Notas:

01 - Si quieres que queden más picantes, añade jalapeños picados o un toque de chile en polvo al relleno.
02 - Puedes envolver los burritos en papel aluminio y congelarlos para comidas rápidas. Solo tendrás que recalentarlos en el horno o microondas.