01 -
Combina la levadura, el agua tibia y una cucharada de azúcar. Deja reposar por 5-10 minutos hasta que haga espuma.
02 -
En un recipiente aparte, combina los ingredientes secos. Agrega la manteca, las yemas y la vainilla a la mezcla de levadura. Poco a poco añade la mezcla de harina. Amasa durante unos 2 minutos hasta formar una masa suave.
03 -
Pon la masa en un recipiente engrasado, cúbrelo y colócalo en un lugar cálido por 1 hora hasta que doble su tamaño.
04 -
Estira la masa hasta tener un grosor de 1½ cm. Usa un cortador circular de 6 cm y coloca cada pieza en bandejas preparadas.
05 -
Deja que las donas reposen nuevamente en un lugar cálido por unos 45 minutos, hasta que doblen su volumen.
06 -
Calienta el aceite a unos 180°C. Fríe las donas de 30 a 45 segundos por lado hasta que estén doradas. Mientras aún estén calientes, cúbrelas con azúcar.
07 -
Haz un agujero en cada dona con un palillo o similar. Rellena el centro con la crema de avellanas usando una manga pastelera. Opcional: coloca un poco más de crema encima.