01 -
Calienta el horno a 175°C (350°F) con la rejilla en el centro. Forra una bandeja de horno con papel para hornear, dejando que sobresalga un poco para manejarlo más fácilmente después.
02 -
Mezcla bien en un bol mediano la harina de garbanzo, las hierbas secas, el ajo en polvo, la sal y la pimienta negra. Si la harina de garbanzo tiene grumos, tamízala o asegúrate de deshacerlos al batir.
03 -
Forma un pequeño hueco en el centro de los ingredientes secos. Vierte el aceite de oliva y la mitad del agua. Remueve con una cuchara de madera, incorporando gradualmente el resto del agua hasta que consigas una masa uniforme y sin partes secas.
04 -
Si la masa está muy seca, agrega agua poco a poco (una cucharadita cada vez). Si está demasiado pegajosa, espolvorea un poco más de harina de garbanzo. La masa debe ser firme pero manejable, como plastilina.
05 -
Sobre una superficie limpia con un poco de harina de garbanzo, amasa la masa suavemente durante unos 30 segundos hasta que quede lisa. Debe estar un poco pegajosa, pero no tanto como para adherirse a las manos.
06 -
Coloca la masa entre dos hojas de papel para hornear. Con un rodillo, extiéndela hasta un grosor uniforme de aproximadamente 3 mm.
07 -
Quita con cuidado la hoja superior de papel para hornear. Con un cortador de pizza, cuchillo afilado o cortador de pastelería, marca la masa en formas de galletas deseadas: cuadrados, rectángulos o rombos son buenas opciones.
08 -
Si lo prefieres, pincela ligeramente la superficie de la masa con agua o aceite de oliva. Espolvorea las coberturas opcionales como semillas de sésamo, sal en escamas o hierbas secas y presiona suavemente para fijarlas.
09 -
Coloca la masa marcada en la bandeja con el papel para hornear. Hornea de 15 a 20 minutos, revisando a partir del minuto 12. Las galletas deben quedar doradas en los bordes y firmes al tacto.
10 -
Saca la bandeja del horno y enfría completamente las galletas sobre la misma bandeja. Se volverán más crujientes mientras enfrían. Para un extra de crujido, apaga el horno y deja las galletas dentro con la puerta entreabierta por unos 10-15 minutos más.
11 -
Cuando estén completamente frías, separa las galletas por las líneas de corte. Almacena en un recipiente hermético a temperatura ambiente por hasta una semana.