01 -
Sigue la receta de la masa de pizza hasta el paso 4. Una vez esté lista, aplástala un poco para eliminar burbujas de aire. Divide en dos partes. Sobre una superficie con un poco de harina, extiende cada porción hasta lograr un rectángulo grande de aproximadamente 25x30 cm.
02 -
Con un pincel, cubre ligeramente la parte superior de cada rectángulo con 1 cucharadita de aceite de oliva. Haz pequeños hoyos con los dedos para prevenir que se hinche. Extiende 1/3 de taza de salsa de pizza sobre cada rectángulo. Espolvorea condimento italiano y ajo en polvo al gusto por encima.
03 -
Coloca 1/2 taza de queso mozzarella uniformemente sobre la salsa y luego añade las rodajas de pepperoni. Enrolla con cuidado los rectángulos de masa formando troncos compactos. Coloca los troncos en una bandeja de horno preparada, con la unión hacia abajo, y refrigéralos destapados por al menos 20 minutos.
04 -
Precalienta el horno a 200°C. Cubre dos bandejas grandes para hornear con tapetes de silicona o papel pergamino.
05 -
Saca los troncos del refrigerador y córtalos en rebanadas de 2.5 cm cada una. Vierte la harina de maíz en un plato o cuenco. Espolvorea la base de cada rollo con harina de maíz y distribuye 12 en cada bandeja con la parte de harina hacia abajo. Si lo deseas, añade más queso por encima.
06 -
Hornea por 15-20 minutos o hasta que los lados estén ligeramente dorados. Déjalos enfriar por 5 minutos y, si lo deseas, decora con albahaca fresca y sirve con más salsa para pizza como acompañante.