
Hoy te llevo a mi rincón asiático en casa con una thai de coco súper cremosa lista en solo 30 minutos. El aroma de curry y coco se cuela por mi cocina y ya quiero que la pruebes conmigo.
Tazón de alegría
Me encanta lo fácil que es preparar esto. Solo necesitas un puñado de verduras frescas y unos cuantos básicos para tener un platillo lleno de sabor que reconforta cuerpo y mente.
Todo lo que uso
- Kokosmilch: 400 ml, bien cremosa y ecológica
- Caldo de verduras: 500 ml hecho en casa
- Ajo: 2 dientes frescos
- Jengibre: un trozo jugoso
- Pasta de curry: la que más me gusta del supermercado asiático
- Aceite de coco: extra virgen
- Zanahorias: 2, bien crujientes
- Champiñones: 150 g, marrones (puedes usar Portobello)
- Brócoli: 200 g en ramilletes
- Col: 100 g bien finita (usa repollo blanco porque el spitzkohl casi no llega a España o México)
- Salsa de soja: Siempre busco una buena japonesa
- Limón: uno fresco y jugoso (usa lima si encuentras, pero limón queda perfecto)
- Cilantro: recién cortado, del huerto si tienes
Antes de prender el fuego
Siempre arranco organizando todo. Pico ajo y jengibre y el aroma ya lo dice todo. Corto las verduras parecidas en tamaño para que luego todo quede parejo y listo al mismo tiempo.
Empezando con sabor
Primero pongo aceite de coco en la sartén y echo el ajo y el jengibre. Van soltando olor. Luego vino la pasta de curry y de repente te llega ese toque exótico que me hace acordar a mis viajes por Tailandia.
Toque colorido
Aquí le entran mis favoritos: el brócoli, las zanahorias y los champiñones. Solo salteo un ratito y ya el sabor sale a la luz. Muevo todo con suavidad para que tome buen color.

El momento cremoso
Ahora echo la leche de coco y el caldo, y cambia todo. La leche de coco deja todo suavecito y el caldo equilibra los sabores.
Col para textura
El repollo cortado bien fino es mi toque especial, le da esa textura rica y crujiente que convierte cada bocado en algo divertido.
Buscando el punto justo
Aquí viene lo importante, probar y corregir. Agrego salsa de soja para que agarre sabor y al final exprimo jugo de limón fresco para levantarlo. Ajusto hasta que todo quede en su punto.
Frescura total
El cilantro recién picado lo cierra todo. Refresca los sabores y encima lo deja con una pinta espectacular.
Cambia como quieras
Lo mejor es que puedes meter lo que tu nevera tenga. A veces le pongo calabacín, otras pimiento, incluso pak choi si tengo. El fondo sabroso siempre queda buenísimo.
Prepara con tiempo
En días ajetreados agradezco tener un tupper esperando en la nevera. Los sabores se hacen todavía más ricos de un día para otro. Es una salvación cuando ando apurada.

El truco del champiñón
Me gusta añadir los champiñones frescos justo cuando vuelvo a calentar la sopa. Así se quedan jugosos y su sabor no se pierde. Es un pequeño detalle que cambia todo.
Pica a tu gusto
Aquí cada quien pone la picante que quiera. Siempre hay pasta de curry extra o algún chile molido para el toque personal. Así cada quien la disfruta a su manera.
Suma proteínas
Para saberme llena, a veces le pongo tofu dorado o garbanzos crujientes. Quedan bañados en la sopa y suman sabor y textura.
Para todos
Cuando tengo alguien que no come gluten, en vez de salsa de soja pongo tamari. Queda igual o más sabroso y todos pueden probar sin líos.
Elijo calidad
La leche de coco siempre la pillo ecológica, y las verduras en el mercado local. Eso se nota enseguida y suma puntos para el planeta también. Decisiones pequeñas que valen la pena.
Ideal para familia
Hasta mis peques la disfrutan un montón. La leche de coco la hace suave para los niños y los condimentos le dan ese plus que nos gusta a los grandes.

Perfecta para festejar
Cuando recibo amigos, me gusta abrir la cena con esta sopa. Los sabores exóticos preparan el ambiente y los colores alegran la mesa al instante.
Detalles crujientes
Me chifla ponerle arriba cacahuetes tostados y semillas de sésamo. Le dan ese contraste crocante que la hace irresistible.
Más hierbas más diversión
Aparte del cilantro, me animo con albahaca asiática o un poco de menta. Cada hierba aporta algo distinto y cada vez la sopa es toda una sorpresa.
Va con todo
En verano la sirvo tibia, en invierno bien calentita. Se adapta a cualquier estación y nunca falla.
Rápida y sin líos
En días atareados esta sopa de treinta minutos me salva. Mientras burbujea puedo hacer otras cosas y al final me espera algo rico de verdad.
Cambia y prueba
A lo largo del tiempo probé varias pastas de curry. A veces le doy con la roja, otras con la verde. Cada una le pone un toque especial.

Desde mi cocina con cariño
Esta thai de coco es mi forma de compartir un poco de Asia contigo. Es fácil, tiene sabores que conquistan y le pone chispa a cualquier día. ¡Disfrútala mucho!
Preguntas Frecuentes
- → ¿Qué verduras puedo usar en la sopa?
Esta sopa es muy versátil. Puedes usar cualquier verdura que tengas a mano. Solo ten en cuenta los diferentes tiempos de cocción.
- → ¿Puedo preparar la sopa con anticipación?
Sí, es perfecta para adelantarte. Si usas champiñones, añádelos al recalentarlo para que no se ablanden demasiado.
- → ¿Qué tan picante es esta sopa?
La intensidad depende de la cantidad de currypasta verde que uses. Normalmente tiene un nivel de picante suave a medio.
- → ¿Es obligatorio usar cilantro?
No. Si no te gusta, simplemente déjalo fuera o reemplázalo por perejil o albahaca tailandesa.
- → ¿Puedo usar otros tipos de currypasta?
Claro, también puedes usar currypasta roja o amarilla, aunque la verde suele ser más suave y fresca.