01 -
Lava bien las fresas, quítales las hojas y córtalas por la mitad. Colócalas en un procesador de alimentos y tritúralas hasta que queden completamente suaves, sin ningún grumo.
02 -
Vierte la mezcla de fresas en una sartén antiadherente amplia. Cocina a fuego medio mientras revuelves constantemente durante unos 5-10 minutos. Debe espesarse, tomar un tono rojo oscuro y tener textura similar a la mermelada. Pásala a un recipiente, cubre con plástico y deja enfriar a temperatura ambiente.
03 -
Enciende el horno a 120°C (250°F) con ventilador activado, o a 140°C (285°F) si lo tienes apagado. Coloca la rejilla en el centro y prepara una bandeja de cupcakes con cápsulas blancas.
04 -
En un recipiente mediano, mezcla la harina, el polvo de hornear y la sal. Déjalo a un lado.
05 -
Usa una batidora eléctrica a velocidad media-alta para batir los huevos durante un minuto hasta que estén espumosos. Lentamente, añade el azúcar mientras sigues batiendo (esto toma aproximadamente un minuto). Luego, sigue batiendo por 6 minutos adicionales hasta que la mezcla esté pálida, espesa y haya triplicado su volumen.
06 -
Añade la mitad de los ingredientes secos junto con el concentrado de fresa a la mezcla de huevos. Bate todo a baja velocidad solo hasta integrar. Repite con la otra mitad de los secos. La mezcla quedará espesa y es normal que tenga pequeños grumos.
07 -
En un cazo, calienta la leche junto con la mantequilla a fuego medio. Remueve constantemente hasta que alcance unos 60°C (140°F) o aparezcan pequeñas burbujas en las orillas. No dejes que hierva.
08 -
Vierte la mitad de la leche caliente en la masa, junto con el aceite, la vainilla y el colorante rojo (si lo usas). Mezcla todo a baja velocidad hasta que esté uniforme. Añade el resto de la leche y mezcla nuevamente. La masa será líquida.
09 -
Llena las cápsulas de cupcake un poco más de 3/4 partes (puedes usar una cuchara para helado para esto). Hornea durante 25 minutos o hasta que la superficie rebote al tocarla suavemente. Sácalos del horno y colócalos sobre una rejilla hasta que se enfríen por completo.
10 -
Mientras los cupcakes se enfrían, prepara la crema de mantequilla de fresa según la receta que utilices.
11 -
Llena una manga pastelera con una punta abierta en forma de estrella. Forma un remolino de glaseado sobre cada cupcake y termina decorando con la mitad de una fresa fresca.