01 -
Coloca los filetes de pollo entre dos trozos de plástico o dentro de una bolsa para congelados, y aplánalos suavemente con un mazo o un cazo.
02 -
En un plato, distribuye la harina de forma uniforme. En otro, bate los huevos y sazónalos con sal y pimienta. Usa un tercer plato para el pan rallado o el Panko.
03 -
Pasa cada filete primero por harina, después por el huevo batido, y finalmente cúbrelo bien con el pan rallado presionando ligeramente.
04 -
Calienta la manteca de cerdo en una sartén amplia a fuego medio. Cocina los filetes de pollo alrededor de 4 minutos por cada lado hasta que estén dorados. Déjalos reposar sobre papel de cocina por unos momentos.