
No te imaginas lo deliciosa que está mi sopa cremosa con albóndigas italianas. En casa ya es nuestro plato estrella cuando queremos estar a gustito. Imagina unas albóndigas súper suaves en un caldo de tomate con nata, bien cremosito, y pasta cocida en su punto. Cada cucharada se siente como si cenaras en una trattoria italiana ¡pero con extra cariño casero!
Por Qué Te Va a Encantar
Esta sopa te hace sentir abrazado con esos sabores italianos que tanto nos gustan. Lo mejor es que la tienes lista en media hora usando cosas que ya tienes por casa. Agrega pan con ajo bien crujiente al lado y ya tienes pura felicidad calentita.
Necesitarás Esto
- Pasta: Usa dos tazas de espirales tipo fusilli o tornillitos atrapan todo lo rico.
- Albóndigas: Pueden ser caseras o compradas ya preparadas las dos quedan genial.
- Tomate triturado: Una lata grande de unos 800 g la base de sabor.
- Caldo de pollo: Seis tazas para que te salga la sopa perfecta.
- Nata para montar: Media taza y de repente todo es suavecito.
- Espinaca fresca: Tres tazas para color y toquecito sano.
- Condimento italiano: Una cucharadita para darle alegría.
- Pasta de tomate: Dos cucharadas para el sabor más profundo.
- Cebolla y ajo: Son la base que siempre va primero.
Increíble Sopa Italiana
- Último Toque Cremoso
- Añade la nata y la espinaca justo al final y mira cómo se vuelve sedosa.
- Todo Al Plato
- Sirve en un cuenco, échale parmesano, y no te olvides de un buen pan de ajo.
- Empieza Con Las Albóndigas
- Las que más te gusten, caseras o congeladas, lo que te venga mejor.
- Prepara La Base
- Cocina el ajo y la cebolla en aceite de oliva hasta que huela increíble.
- Dale Vida Al Caldo
- Mete pasta de tomate, hierbas, caldo y tomate triturado deja que hierva.
- Pasta y Albóndigas Dentro
- Pon la pasta y las albóndigas deja que burbujee hasta que la pasta esté lista.

Mis Secretos Top
Ve probando y ajustando la sazón en cada paso verás cómo mejora el sabor. Si tienes una corteza de parmesano métela mientras hierve y verás la maravilla. Ponle más caldo o nata hasta que te guste la textura.
Mantén Todo Fresco
Dura genial hasta cinco días en la nevera y se pone aún mejor. Cuando vayas a recalentarle échale un chorrito de nata o caldo te queda igual de suave. Prueba y ajusta de sal al final siempre.
Avánzale Sin Lío
Prepara las albóndigas y el caldo antes y la pasta déjala para el final. La pasta recién hecha marca la diferencia y todo queda en su punto.
Congélala Sin Problema
No pongas la pasta si la vas a congelar, añádela cuando la calientes. Puede estar en el congelador hasta tres meses. Saca la noche anterior, calienta, mete pasta nueva y listo para repetir.

Dale Tu Toque
Puedes usar kale en vez de espinaca y hasta meter alubias blancas. Si te gusta el picante lánzale chile seco o jalapeños frescos. Hazla como más te guste es súper versátil.
Combinaciones Ganadoras
No hay nada como mojar pan de ajo en esta sopa. Una ensalada César sencilla al lado lo completa. Si quieres, asa unas verduras y tienes la comida italiana perfecta.
Más Queso Más Felicidad
Parmesano fresco o un poco de Pecorino al final lo cambian todo. Se funden y hacen esos bocados de queso increíbles.
Sin Gluten No Hay Problema
Pon pasta sin gluten o arroz si prefieres. Fíjate en las etiquetas de albóndigas y caldo si hace falta. Así todos disfrutan este platillo tan reconfortante.

Para Variar Un Poco
A veces lo convierto en un guiso usando menos caldo y cubriéndolo de queso. Unos minutos en el horno hasta que burbujee y queda brutal.
Más Verduras Entra Sin Problema
Puedes meter zanahoria, apio, pimientos lo que más te apetezca. Cocínalas junto a la cebolla y el ajo para que cojan todo el saborcito.
Con Más Sabor Picante
Ponle chile seco o cayena y ajusta a tu gusto. Empieza suave, siempre puedes ponerle más. Así la haces tuya.
Ideal Para Compartir
Queda de lujo si tienes visitas a cenar. Sírvela en bols bonitos con hierbas frescas por encima a todos les encanta.

Para Peques
La pasta pequeña hace que los niños coman encantados. Si no les gusta la espinaca puedes triturarla y ni la notan. Se la toman y ni se enteran de lo buena que es.
Opciones Sin Lácteos
Leche de coco queda súper bien en vez de nata. Puedes poner levadura nutricional en vez de queso y te queda sabroso sin nada de lácteos.
Perfecta Para Adelantar
Me flipa hacer mucha y prepararla en tapers para la semana. Calientas en un minuto y ya tienes comida lista en cualquier momento.
La De Siempre
Siempre queda bien: albóndigas jugosas, caldo cremoso y la pasta perfecta. Al final todos te la piden y se vuelve tradición de familia.

Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo usar albóndigas congeladas?
- Sí, usa una bolsa de 500-550 g de albóndigas descongeladas. Asegúrate de que estén completamente descongeladas o cocidas según las instrucciones del paquete.
- → ¿Por qué mi sopa está muy espesa?
- La pasta sigue absorbiendo líquido al reposar. Añade más caldo o crema para ajustar la textura a tu gusto.
- → ¿Cómo puedo darle más sabor?
- Añade sal y pimienta en cada paso de la preparación. También puedes agregar una corteza de queso parmesano durante la cocción para un sabor más intenso.
- → ¿Puedo prepararla con anticipación?
- Sí, pero ten en cuenta que la pasta seguirá absorbiendo líquido con el tiempo. Es posible que necesites añadir más caldo al recalentar.
- → ¿Qué puedo usar en lugar de espinacas?
- La col rizada u otras hojas verdes funcionan bien. Ajusta el tiempo de cocción según sean hojas más duras.