
Hoy en mi cocina huele increíble gracias a una versión distinta de los clásicos pimientos rellenos. Mi sopa de pimientos rellenos trae esos mismos sabores que nos encantan, pero todo es mucho menos complicado. La mezcla del dulce de los pimientos y la carne a las brasas me hace sentir en casa.
Tradición reinventada
Me fascina esta sopa porque despierta recuerdos bonitos de la infancia con pimientos rellenos pero sin tanto lío. Solo un par de pasos y algunos ingredientes sencillos, y ya tengo algo cálido y casero en la mesa.
Lo que lleva mi sopa
- Aceite de oliva: Un par de cucharadas para comenzar todo.
- Arroz: 100 g, perfecto para llenar el estómago.
- Tomate triturado: Una lata grande (elige el que más te guste).
- Pimientos: Tres de colores, los del mercado siempre son los mejores.
- Cebolla: Una mediana, siempre ayuda a que todo sepa mejor.
- Zanahoria: Grande y en cubos chiquitos, aporta un dulzor especial.
- Carne picada: 400 g mezclada — sale súper jugosa.
- Caldo de res: Un litro casero, el que puedas obtener localmente.
- Concentrado de tomate: Dos cucharadas, para darle potencia de sabor.
- Especias: El toque personal con tu condimento preferido.
Así preparo mi sopa
- Último paso
- Ajusta sal y pimienta, decora con hierbas frescas y disfruta.
- El arroz
- Déjalo en hervor suave 15 minutos, quedará en su punto.
- El sabor base
- Incorpora el tomate, el concentrado y la caldosita, mezcla todo muy bien.
- La carne
- Sofríe hasta que se desmenuce y añade tus sazones favoritos.
- Las verduras
- Pica todo bien pequeño y cocina en el aceite hasta oler rico.
Más fácil imposible
Esta sopa me salva en días de prisas. Solo necesitas una olla y productos frescos. En nada tienes un plato delicioso, perfecto cuando no quieres complicarte pero igual buscas sabor.
Preparado con visión
Lo mejor es que esta sopa aguanta perfecto en la nevera unos días. A veces congelo tupers y así tengo comida casera lista cuando sea. Súper conveniente.
Sabe a hogar
Cada vez que la como, me transporta. El sabor fuerte y los aromas reconfortantes llenan de cariño el alma. Es mi comida de consuelo favorita, te lo juro.
Mis trucos favoritos
Un poquito de pimentón ahumado sube el sabor un montón. Unas gotitas de jugo de limón justo antes de servir le ponen chispa. Y cuando quiero que quede cremosita, le pongo una cucharada de crema ácida.

Qué acompaño
Me encanta mojar un trozo de pan crujiente. A veces hago ensalada fresca o hasta relleno unos wraps con la sopa. Hay mil formas de disfrutarla, es súper versátil.
Va con todo
La sopa te saca del apuro cualquier día, pero también queda bien cuando tienes visita. En invierno calienta mucho y si vienen amigos, está lista en un rato.
Ligera y sabrosa
Entre zanahorias, pimientos y tomate, esta sopa está cargada de vitaminas. La carne suma proteína y el arroz sacia muchísimo. Es equilibrada, te llena bien y te hace sentir genial.
Reaprovecha fácil
Si sobra, la uso como salsa para pasta. Nomás le pones más especias y tienes un plato nuevo. Aprovechar restos nunca fue tan divertido.
Opciones diferentes
Cuando tengo ganas, cambio el arroz por quinoa o couscous, cambia bastante. Zucchini y maíz quedan riquísimos también. Cada vez la sopa sale distinta.
Sopa que alegra
Más que un plato, es mi abrazo en taza. Une lo clásico con lo fácil de hoy en día. Ya no puedo pasar sin ella.
Llena de recuerdos
Me trae recuerdos de momentos divertidos y tranquilos, tanto cenas con amigos como comidas familiares ruidosas. Parece que siempre fue parte de mi historia.
Gusta a todos en casa
Mis peques la adoran porque no es picante y queda suavecita. Con palitos de pan o galletas saladas se vuelve su favorita. De verdad, todos quedan contentos.

Comprado con conciencia
Prefiero buscar verduras de productores cercanos. Los pimientos y tomates frescos locales tienen mucho mejor sabor y ayudan al medio ambiente. Así se cocina doble rico.
Viaje de sabor
Me animo a cambiar los condimentos: a veces le pongo comino y chile para darle onda mexicana, otras veces va con albahaca y orégano y se pone italiana. Es como dar la vuelta al mundo en una cuchara.
Siempre resuelve
Saber que hay un tupper en el congelador me tranquiliza cuando todo va muy rápido. Solo calentar y listo. De verdad, lo simple es lo mejor.
Para ocasiones especiales
En reuniones de familia o comidas compartidas, esta sopa siempre se roba las miradas. Hace que todos quieran llenar de nuevo su plato.
El toque final
Me gusta rallar un poco de queso encima, ponerle crutones caseros o hierbas frescas. Unas cosas simples y la sopa parece de chef.
Toque de lujo
Una cucharadita de crema fresca o de aceite de trufa convierte la sopa en algo digno de celebración. Ideal para una cena romántica o cuando buscas impresionar en casa.
Siempre fresca
Guardo la sopa en recipientes cerrados y me dura tres días en la nevera. Separada en porciones y congelada me salvo cualquier día ocupado. Fácil y sabroso.
Se adapta a ti
Lo mejor de este plato es que puedes hacer lo que quieras. Más líquido, menos, cambia las verduras o condimenta diferente, siempre queda genial.

Plato de siempre
Mi sopa de pimientos rellenos prueba que lo simple es lo más sabroso. Confort, sabor y rápida de hacer. Me encanta compartirla, siempre arranca sonrisas.
Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo congelar esta sopa?
Claro, puedes congelarla sin problema. Asegúrate de que esté completamente fría antes de hacerlo. Al recalentarla, agrega un poco de caldo si es necesario.
- → ¿Qué tipo de arroz debo usar?
Arroz de grano corto o largo funciona bien. Evita usar arroz para arroz con leche o risotto, ya que suelen ser demasiado pegajosos.
- → ¿Es posible usar carne vegetariana?
Sí, puedes cambiar la carne molida por opciones vegetarianas como carne de soya o similares. Usa caldo de verduras en lugar de caldo de res para un mejor sabor.
- → ¿Qué hago si la sopa está muy espesa?
El arroz tiende a absorber líquidos con el tiempo. Agrega más caldo caliente o un poco de agua hasta que llegue a la consistencia deseada.
- → ¿Qué podría acompañar esta sopa?
Es un plato completo por sí mismo, pero un trozo de pan crujiente para mojar siempre es una buena idea.
Conclusión
Una sopa reconfortante que captura la esencia de los clásicos pimientos rellenos en una receta fácil de preparar.