
Albóndigas con mermelada de uva
No sabes el éxito que tienen estos bocaditos en cada fiesta. Es mi truco estrella, porque sólo lleva tres cosas, se prepara en un momento y todo el mundo alucina. La primera vez que los hice, mi pareja pensó que estuve toda la tarde en la cocina... ¡ni idea tenía! Son dulces, con un puntito ácido, y me han salvado cada vez que se llena la casa de gente sin avisar. Ahora siempre quieren repetir.
La última Navidad, mi vecina no me dejó en paz hasta que le conté cómo los hago. Sus niños volvieron una y otra vez a servirse más. Ahora ella lleva albóndigas a todas las reuniones del cole.
Imprescindibles:
- Albóndigas congeladas: suelo comprar las de Mercadona o Alcampo
- Mermelada de uva: créeme, funciona
- Salsa barbacoa: Hunt's o Heinz te salvan la vida aquí
- Salsa picante tipo Valentina o Cholula: el toque justo para animar
- Crockpot u olla de cocción lenta: tu aliada de verdad
Arranca la fiesta:
Salsa irresistible
Echa la mermelada, la barbacoa y la salsa picante en la olla
Mezcla un poco, no hace falta esmero
Directo del congelador mete las albóndigas encima

Tiempo de cocción
Déjalas a fuego bajito unas 3 a 4 horas
Remueve a mitad de camino
Tu casa va a oler de lujo
Cómo se sirven
Mantén la olla encendida en modo calor
Pon palillos para que todos cojan fácil
Verás cómo vuelan
La primera vez que las llevé fue al fin de curso de mi hijo. Se formó un grupo de madres a mi alrededor pidiéndome la receta. Ahora a todas las reuniones les dicen "las albóndigas esas".
No sé cómo algo tan sencillo, con sólo tres cosas, puede hacer que todos quieran repetir (¡y tripitir!).
Versiones top para fiestas:
Cambia la mermelada de uva por albaricoque, prueba lo brutal que queda
Échale un chorrito de tequila y tienes una versión más cañera
Para Navidad, mete salsa de arándanos
Si quieres más picante, un poco de Sriracha
Mi cuñada las hizo una vez con mermelada de frambuesa... no están mal, pero la de uva sigue ganando. La mezcla con la barbacoa no falla. Aunque reconozco, la de tequila ya es costumbre sólo para adultos en casa.
Lo puedes dejar preparado antes:
Mezcla la salsa la noche antes
Deja la olla en modo calor hasta 6 horas
Congela las sobras, aguantan 3 meses
Se recalientan de maravilla
En la última Super Bowl preparé triple cantidad. Pensé que había exagerado. Ni llegó al descanso. Desde entonces, siempre tengo kit de albóndigas en el congelador, por si acaso.

Ideas para servirlas:
Rápido sobre arroz para cenar sin líos
En panecillos como mini sandwiches para el partido
Con puré de papas
Al lado de macarrones con queso
Soluciones rápidas:
¿La salsa está muy espesa? Un poco de agua lo soluciona. ¿Muy líquida? Quita la tapa un rato. ¿Quieres más picante? Otra cucharada de salsa. Son muy fáciles de ajustar, cuesta mucho fallar... salvo que se te olviden.
Cómo se guardan:
Deja que se enfríen bien antes de meter en la nevera
Duran 4 días en el frío
Congélalas ya con la salsa, mejoran todavía más
Para usar, ponlas en la nevera desde la noche anterior
Lo mejor es que mi hijo, que "odia" la mermelada de uva, no puede parar de comerlas. Mira que a veces lo raro es lo que más triunfa.
Sabiduría final de mi cocina:
No levantes la tapa a cada rato
Usa siempre papel para limpiar bien fácil
Guarda más salsa por si acaso
Acuérdate de reservarte unas pocas para ti
Entre nosotros, muchas veces hago de más sólo para que sobren y comerlas al día siguiente. Lo bueno de estas cosas es que te salvan cuando no quieres cocinar complicado, pero igual todos se quedan felices.
Acuérdate, sencillo no es lo mismo que aburrido. Estas albóndigas demuestran que lo fácil, muchas veces, se vuelve lo favorito de la familia. Y de eso va la buena cocina, ¿no?
Mis formas favoritas de comerlas:
Un vecino me enseñó este truco: pon una barra con distintas opciones
En panecillos tipo mini hamburguesa
En platos pequeños con arroz
Con palillos para picar
Junto a puré de patatas
No sabes cuántas veces me han salvado en reuniones improvisadas. Llegar con la olla llena de estas albóndigas te vuelve el héroe de la noche.
Por si surge algún problema:
¿Salsa muy espesa? Un chorro de agua o caldo.
¿Mucho picante? Añade más mermelada.
¿Te falta chispa? Suma más salsa picante.
¿Te queda poco sabor? Un poquito de salsa inglesa y listo.

La semana pasada apareció todo el equipo de béisbol de mi hijo después del entrenamiento. Las albóndigas y un arroz rápido nos salvaron. Los niños las nombraron "albóndigas mágicas". Mejor no les conté lo de la mermelada.
Saca partido a las sobras:
Haz bocatas con las albóndigas
Pícalas y agrégalas a un arroz frito
Congélalas en raciones individuales
Para recalentar, mejor en el microondas de poco en poco
Mis trucos tras meter la pata:
Pon siempre papel en la olla y lo agradecerás después
Ten de sobra los ingredientes para hacer doble
Pon la fecha a las sobras
No saltes el paso de remover, mejora todo
Mi suegra, que siempre renegaba de las cosas "compradas", me pidió la receta tres veces antes de admitir lo de la mermelada. Ahora las hace ella ¡más que yo!
No lo olvides:
La salsa espesa al enfriarse
El día siguiente saben mejor
No cuentes lo de la mermelada a los niños
Haz siempre más de lo que crees que vas a necesitar
Da igual si tienes cena elegante o es martes normal, nunca fallan. Tranquiliza saber que hay comidas simples que encantan a todos y no te complican la vida.