
Este tazón de requesón con tomate, lechuga y tocino nació por casualidad cuando tenía antojo de un sándwich pero quería reducir el pan. Ahora es mi almuerzo favorito - todos los sabores clásicos pero con un giro cremoso que lo hace sentir como nuevo. La mezcla del tocino crujiente y caliente con el requesón frío es totalmente adictiva.
El otro día, mis compañeros de trabajo miraban mi tazón con envidia total. Ahora hacemos reuniones semanales para disfrutar estos tazones juntos - ¿quién diría que el requesón podría ser tan sociable?
Ingredientes sencillos pero poderosos:
- Requesón de buena calidad: - vale la pena comprar el de grasa completa
- Tocino: cocinado hasta que quede bien crujiente - nada de trozos blandos
- Lechuga romana fresca: para ese crujido esencial
- Tomatitos cherry: - los corto por la mitad para que exploten en la boca
- Pimienta negra recién molida: - no la que ya viene molida
- Un chorrito de reducción de vinagre balsámico: para darle un toque elegante

Armando tu tazón:
- Base cremosa:
- Empieza con una buena porción de requesón, haz un pequeño remolino con tu cuchara para crear la base perfecta.
- Añade el protagonista:
- Esparce el tocino crujiente por encima - y quizás prueba un trocito mientras lo haces. Siempre cocino tocino extra porque, seamos sinceros, ¡algunos trozos nunca llegan al tazón!
- Incorpora lo fresco:
- Distribuye la lechuga crujiente y los tomatitos jugosos alrededor. Me gusta dejar algo de tocino visible - ¡es como una joya para tu tazón!
- Sazona con cariño:
- Unas vueltas de pimienta negra fresca despiertan todos los sabores. Luego viene ese hermoso chorrito oscuro de reducción balsámica que hace parecer que estás comiendo en una cafetería elegante.
El fin de semana pasado, preparé estos tazones para un brunch con amigas y los serví en cuencos bonitos de cristal. ¡Todas pensaron que era alguna creación de restaurante hasta que vieron lo fáciles que son de preparar!
Conviértelo en una comida completa:
Me encanta para el almuerzo, pero también es perfecto como cena ligera en noches calurosas de verano. A veces añado aguacate en rodajas o pepino para más frescura.
Hazlo a tu manera:
Pruébalo con diferentes lechugas - la rúcula le da un toque picante muy rico. A veces agrego hierbas frescas como albahaca o cebollino. Cuando los tomates están en temporada, uso unos grandes y jugosos cortados en trozos.
Mantenlo fresco:
Definitivamente es mejor prepararlo y comerlo al momento. Si lo llevas para el almuerzo, mantén todos los ingredientes separados y móntalos justo antes de comer. ¡A nadie le gusta el tocino reblandecido!

Sabiduría de cocina:
- Seca completamente la lechuga - el agua es enemiga del tocino crujiente
- Corta los tomates justo antes de servir
- Guarda algo de la grasa del tocino para cocinar otras cosas - es un tesoro culinario
¿Sabes qué es lo que más me gusta de este tazón? Demuestra que comer mejor no significa renunciar a las comidas que te encantan. Se trata de reinventarlas de una forma fresca. Cada vez que lo preparo, pienso en todos esos sándwiches que comí en la cocina de mi abuela, ¡pero ahora con mi propio toque adulto!
Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo preparar esta ensalada con antelación?
- Prepara el tocino antes, pero arma la ensalada justo antes de comer para mantener la lechuga fresca.
- → ¿Qué puedo usar en lugar del glaseado balsámico?
- El vinagre balsámico normal o tu vinagreta favorita son excelentes alternativas.
- → ¿Qué tipo de queso cottage es mejor?
- Cualquier opción funciona, pero el queso de grasa completa o 2% es más cremoso.
- → ¿Es realmente baja en carbohidratos?
- Sí, esta ensalada no lleva pan, lo que la hace naturalmente baja en carbohidratos.
- → ¿Puedo añadir aguacate?
- Claro, el aguacate añade grasas saludables y hace que sea una BLAT.