
Esta tarta de frambuesa y crema agria mezcla una base crujiente de masa quebrada con un relleno suave de vainilla y el toque ácido de las frambuesas. Con su equilibrio perfecto entre dulzura y acidez, y su textura sedosa, encantará a cualquier amante de los postres, siendo ideal para meriendas veraniegas.
La primera vez que horneé esta tarta, me sorprendió lo bien que combinan las frambuesas ácidas con el dulce relleno de vainilla y crema agria. Mi familia quedó tan impresionada que ahora se ha convertido en una receta obligada para todas nuestras celebraciones.
Elementos esenciales
- Masa quebrada: Esta base de mantequilla y azúcar mantiene su consistencia crujiente incluso con el relleno húmedo
- Crema de vainilla: Da estabilidad al relleno y aporta un delicado sabor que combina a la perfección con las frambuesas
- Crema agria: Crea esa textura irresistiblemente cremosa y añade un toque ácido que completa el perfil de sabor
- Frambuesas: No solo hacen que la tarta luzca preciosa, también aportan frescura y un agradable toque ácido

Preparación paso a paso
- Preparar la masa quebrada:
- Mezcla mantequilla fría, harina, sal y azúcar hasta obtener una masa granulada. Añade el huevo y amasa hasta que quede suave. Deja reposar la masa.
- Formar la base:
- Extiende la masa en un molde desmontable, forma el borde y enfría. Precalienta el horno a 180°C.
- Crear el relleno cremoso:
- Cocina las natillas de vainilla con leche y azúcar, deja enfriar. Mezcla con la crema agria.
- Montar la tarta:
- Distribuye el relleno sobre la base de masa. Coloca las frambuesas uniformemente encima.
- Hornear y terminar:
- Hornea durante 45-60 minutos, deja enfriar. Opcionalmente, añade gelatina para tartas.
He descubierto que esta tarta sabe mejor después de pasar una noche en la nevera. Los sabores se mezclan perfectamente y la crema adquiere una consistencia firme pero suave. En las reuniones familiares siempre es lo primero que se acaba, por eso ahora suelo hacer dos de una vez.
Deliciosa experiencia veraniega
Esta tarta de frambuesa y crema agria representa la perfecta interpretación de un postre de verano. La mezcla de masa quebrada crujiente, cremoso relleno y jugosas frambuesas ofrece una experiencia de sabor equilibrada que convence tanto a los amantes de los dulces como a los paladares más exigentes.
Ideas para servir
- Con café o té caliente
- Acompañada de nata montada
- Decorada con frambuesas frescas
- Con helado de vainilla como postre
Posibles variaciones
- Usar diferentes tipos de bayas
- Añadir ralladura de limón o vainilla a la masa
- Incorporar haba tonka a la crema agria
- Agregar canela a la masa quebrada

Conservación
- Se mantiene en la nevera 3-4 días
- Guardar en el molde o bajo una campana
- No apta para congelar
Después de preparar esta tarta muchas veces, puedo decir que es una de mis favoritas. El equilibrio entre la base crujiente, el relleno cremoso y la frescura de las frambuesas la convierte en un postre que nunca aburre y siempre sorprende. ¡Pruébala y descubre por ti mismo esta deliciosa experiencia!
Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo usar otras frutas?
- Claro, puedes cambiar las frambuesas por otras frutas o bayas. Fresas, arándanos o una mezcla de varias frutas funcionan muy bien.
- → ¿Por qué mi pastel no cuaja?
- Es importante cocinar el pudin el tiempo necesario y enfriar el pastel completamente. Lo mejor es dejarlo en la nevera durante toda la noche.
- → ¿Es necesario usar cobertura de gelatina?
- No es obligatorio, pero da un brillo lindo a las frutas y ayuda a que no se sequen.
- → ¿Cuánto tiempo dura el pastel?
- En la nevera, bien cubierto, se conserva de 3 a 4 días sin problema.
- → ¿Puedo congelar el pastel?
- Sí, divide el pastel frío en porciones y congélalo. Para descongelar, déjalo en la nevera toda la noche.
- → ¿Por qué hay que enfriar la masa?
- Enfriar la masa hace que sea más firme y más fácil de trabajar. Además, previene que pierda su forma durante el horneado.