
Hoy mi casa huele increíble gracias al brócoli crujiente. No paro de hacer esta opción fácil que me tiene enganchada. El smashed brócoli con costra dorada de parmesano ha conquistado a todos en mi mesa. El vegetal jugoso cargado de ajo y queso derretido demuestra que comer sano está riquísimo. Mis amigos que cuidan los carbohidratos no paran de pedirlo.
Por qué me encanta este brócoli
Hasta los que ponen mala cara al vegetal en mi casa se pelean por un poco de este brócoli tan crocante. Me alegra un montón porque aporta montones de cosas buenas al cuerpo. Con el parmesano sale un dorado irresistible. Es mi salvavidas para los días en que todo va acelerado porque se hace rapidísimo.
Lo que necesitas para el smashed brócoli
No vas a usar casi nada especial porque seguro lo tienes en casa. Empiezo con 500g de floretes de brócoli fresco, la base. Después va 50g de parmesano recién rallado, para la cobertura crujiente. Uso tres cucharadas de buen aceite de oliva, dos dientes de ajo y un chorrito de limón para el sabor. Termino con sal y pimienta y queda espectacular. Esta forma nunca me falla.
Así te queda perfecto
Primero lava el brócoli y sepáralo en ramitos. Después mételos 5 minutos en agua salada hirviendo, nada más para que queden firmes. Paso el brócoli al horno sobre papel de hornear, lo aplasto suave con un vaso. Mezclo el aceite con el ajo machacado, un poco de limón, sal y pimienta, y pinto todo. Reparto el parmesano arriba y directo al horno—unos 20 minutos a 200 °C hasta que esté dorado y crujiente.
Tips para más crocancia
Tras muchos intentos, me di cuenta que escurrir súper bien el brócoli es clave para la costra crujiente. Siempre rallo yo el parmesano—queda mejor que el de bolsa. Es importante que el horno no pierda temperatura para que el queso se dore parejo. Estos detalles sí cambian todo.

Mis acompañantes favoritos
En casa lo sirvo junto con ensaladas o con un cremoso puré de patata. Si quiero una cena veggie, lo mezclo con quinoa aromática o patatas camote salteadas en cubos. Cuando vienen amigos, lo pongo con un dip de yogur con ajo hecho en casa—queda buenísimo.
Cómo conservar el brócoli crujiente
Si te sobra alguno (cosa que rara vez pasa), el brócoli aguanta dos días en el refri. Para calentarlo mete 10 minutos a 180 °C en el horno y así sigue crocante. Cuando hace calor, también queda delicioso frío en una ensalada.
Ideas para cambiar la receta
Me gusta experimentar, así que a veces echo escamas de chile o pimentón junto al aceite para un toque picante. Para mis amigos veganos, le pongo queso vegetal y queda genial. También me ha funcionado con coliflor o calabacín. Invéntate tus combinaciones.
Por qué este brócoli me vuelve fan
No paro de hacer el smashed brócoli porque es rápido, nutritivo y tiene un sabor espectacular. De snack, acompañante o plato principal, siempre queda perfecto. En mi casa, ya se volvió un clásico de confianza.
El lado saludable del brócoli
Desde que me fijo en comer mejor, aprecio aún más el brócoli. Aporta una bomba de vitaminas y minerales que nos ayuda a sentirnos bien. Además, está lleno de antioxidantes buenísimos. Comer sano así sí que motiva.
Los peques también lo disfrutan
Al principio mis hijos dudaban, pero ahora se lo comen encantados. Le pongo menos especias y ofrezco un dip rico al lado. Esa capa de queso tan dorada hace que quieran probar el vegetal. Así nunca falta el toque verde en nuestros platos.

Cocinar sin desperdicio
Intento aprovechar todo en la cocina: aquí uso también los tallos del brócoli cortados pequeños. Los restos los reciclo en otros platos. Si no tengo parmesano, uso el queso que haya en la nevera. Así no tiro nada.
Ideal para ocasiones especiales
Cuando hay visitas, convierto el brócoli en el centro de atención. Pongo arriba piñones tostados, unas gotas de crema de balsámico y hierbas frescas—queda de fiesta. Va genial con salmón a la plancha o para compartir en una mesa vegetariana.
Brócoli viajero
Las especias las cambio todo el tiempo. Para algo mediterráneo, uso orégano seco y romero. Si prefiero sabores asiáticos, añado aceite y semillas de sésamo tostado. Así, nunca te aburres y cada vez sabe diferente.
Muy práctico para dejar listo
Cuando sé que no voy a tener tiempo, dejo el brócoli hecho por adelantado. En un tupper hermético aguanta fresco en el refri y se calienta fácil. Me salva el almuerzo en la ofi o cuando estoy en la calle.
Formas nuevas de sazonar
Con el tiempo probé de todo: pimentón, chile o comino cambian el sabor totalmente. A veces combino diferentes quesos para la costra. Unas gotas de lima justo antes de servir dan un toque intenso y fresco.

Así resumo el smashed brócoli
Descubrir el brócoli crujiente fue un acierto total. Es fácil, sano y tiene un sabor que siempre apetece. Ya sea solo, como guarnición o plato principal, nunca defrauda. Denle una oportunidad que seguro repiten.
Preguntas Frecuentes
- → ¿Para qué hervir el brócoli antes?
Hervirlo suaviza el brócoli para aplastarlo fácilmente. Déjalo firme para que no se deshaga.
- → ¿Puedo usar otro tipo de queso?
Claro, también puedes probar con Pecorino o Grana Padano. Elige un queso con buen sabor y que derrita bien.
- → ¿Cómo aplasto el brócoli correctamente?
Usa un vaso pesado o una taza. Hazlo con cuidado para que no se rompa el brócoli.
- → ¿Es posible dejar el plato preparado?
Puedes hervir el brócoli con antelación. Para que quede crujiente, hornéalo justo antes de servir.
- → ¿Cómo saber si está listo el brócoli?
El queso deberá estar dorado y los bordes del brócoli ligeramente crujientes.