
Hoy quiero contarte mi gran hallazgo veraniego. Una Gazpacho de rábano, súper cremosa y con un rosa vibrante que alegra cualquier día de calor. Cuando el sol aprieta, este plato siempre me salva.
Mi pasión por la Gazpacho
Desde que visité España la primera vez, quedé completamente enganchada a la Gazpacho. Esta sopita fría y refrescante es mi as bajo la manga en verano. Agregando rábanos y almendras, cambio el clásico de siempre y queda deliciosa.
Inspiración andaluza
En mi último paseo por el sur de España probé el famoso Ajoblanco. Esta sopa blanca de almendras fue la chispa para crear mi versión rosa, muy diferente pero igual de rica.
El color que grita verano
El rosa encendido de los rábanos me tiene fascinada. Siempre juego con los colores en la cocina y el toque picante de los rábanos hace que esta Gazpacho sea única.
Lo que vas a necesitar
- Rábanos: 200 g bien crujientes
- Almendras: 50 g peladas
- Pan blanco: 2 rebanadas, si es de ayer mejor
- Pepino: 1 pequeño y jugoso
- Cebolla: 1 cebollita suave
- Ajo: 1 diente fresco
- Pimiento rojo: 1 grande y dulce
- Vinagre de vino tinto: El de tu preferencia
- Aceite de oliva: El que más te guste
- Condimentos: Sal marina y pimienta negra recién molida
Dando un toque ahumado
Me encanta agregar ese aroma ahumado especial a la Gazpacho. Para lograrlo, aso yo misma el pimiento. El olorcito que sale me recuerda a España y es irresistible.

El truco del pimiento
Una amiga española me enseñó el secreto: asar el pimiento directo al fuego le da un sabor increíble. Luego, lo dejo sudar en un recipiente tapado y la piel se quita facilito.
Preparar todo con cariño
Mientras el pimiento se enfría, corto el resto de verduras en trozos. Las hojas del rábano van para un caldo o para hacer pesto, y el pan se rompe en pedazos. Aquí no se tira nada.
El toque cremoso de la almendra
Te cuento mi secreto: uso almendras blanqueadas para una textura súper suave. Le dan esa cremosidad especial y el sabor queda perfecto con los rábanos.
Quitando la piel al pimiento
Pelar el pimiento se vuelve casi meditativo. La piel quemada sale fácil y queda la carne dulce y jugosa, que lleva nuestra Gazpacho a otro nivel.
Todo a la licuadora
Llega la parte más divertida. Mando todos los ingredientes a la batidora potente. Cada vuelta se pone más rosada, hasta que sale ese color tan mágico.
El momentito final
Ahora pruebo y ajusto el vinagre, poco a poco, hasta que queda justo como quiero. La sal y pimienta terminan de resaltar todos los sabores.

Buscando la textura perfecta
La Gazpacho tiene que ser tan suave que se deshaga en la boca. Si necesito, agrego un poquito de agua y vuelvo a probar hasta lograrlo.
Hay que tener paciencia
Ahora viene lo complicado: dejarla enfriar al menos una hora entera. Así todos los sabores se unen y queda aún mejor.
Entrando por los ojos
La magia está al servir. Echo un poco de aceite de oliva extra, almendras picadas y, si tengo, algunos brotes de rábano. Comer empieza por la vista.
Un baile de sabores
¿Qué hace especial esta Gazpacho? El contraste dulce-picante. El pimiento asado lleva su dulzura suave y el rábano añade el toque picante intenso. Esa combinación es adictiva.
Toppings que me encantan
Si tengo fresco, espolvoreo albahaca o eneldo de mi huerto. Si me apetece más picante, le pongo unas gotas de mi salsa de chile casera.
Una forma original de servir
En noches calurosas, sirvo la Gazpacho en vasos bonitos, con hielo y una pajita. Así refresca un montón y a mis invitados les encanta.

Aprovechando todo
Siempre trato de no desperdiciar nada en la cocina. El pan viejo vuelve a tener vida y las hojas de rábano las uso luego en un pesto delicioso.
¡Prueba y combina!
Si te animas, cambia los rábanos por remolacha o pon cubitos de pepino como topping. La base es muy versátil, y cada variante trae nuevas sorpresas.
Mi favorita del verano
Cuando hace calor, esta Gazpacho es mi mejor amiga. Refresca un montón, llena y es ideal para cualquier día bajo el sol.
Nueces para variar
A veces mezclo diferentes frutos secos. Si busco suavidad, uso anacardos. Para un sabor más fuerte, van nueces. Todas quedan geniales.
El centro de atención en la fiesta
Llevo mi Gazpacho rosa a cualquier reunión veraniega y todos quedan sorprendidos. Ese color tan llamativo y el sabor hacen que nadie se resista.
Para días con prisa
Si tengo poco tiempo, me salto el paso de asar el pimiento. También queda espectacular y bien fresca, sólo que diferente.

De mi cocina para ti
Esta Gazpacho color rosa es de mis favoritas para el verano. Tiene lo mejor: ingredientes frescos, sabores inesperados y ganas de experimentar. Prueba y déjate conquistar.
Preguntas Frecuentes
- → ¿Es obligatorio asar los pimientos?
- No, también se pueden usar frescos. Aunque asarlos agrega un toque ahumado muy especial.
- → ¿Cuánto tiempo dura el gazpacho?
- Puede durar 2-3 días bien cerrado en el refrigerador. Mezclarlo nuevamente antes de servir y ajustar sazón si es necesario.
- → ¿Puedo usar otro tipo de pan?
- Sí, aunque lo tradicional es usar pan blanco con un sabor neutro y una textura suave. Esto ayuda a mantener la receta equilibrada.
- → ¿El gazpacho es muy picante?
- La picantez es leve, aportada mayormente por los radieschen. Si prefieres más intensidad, podrías añadir un poco de chile o cayena.
- → ¿Qué acompañamientos puedo servir?
- Pan tostado es la elección clásica. También puedes agregar dados de verduras frescas o más almendras picadas como complemento.