
Me encantó el rugelach desde que una vecina judía me enseñó el truco. Ahora, cada invierno, estas delicias de arándano y naranja son mi sello. El aroma que sale del horno cuando se hornean es brutal. La masa hojaldrada envuelve un relleno jugoso y el toque cítrico lo llena todo de alegría.
Galleta Que Roba Suspiros
En cada fiesta estas galletas se llevan todas las miradas. Rompen suavecito y el relleno de arándano con naranja anima cada mordisco. Siempre hay quien pide la receta y me encanta invitar a todos a probarlas.
Lo Básico Que Hay Que Tener
- Azúcar: Dos cucharadas te dan ese acabado brillante arriba.
- Nueces: Media taza, yo las tuesto para que tengan más sabor.
- Queso crema: Ocho onzas recién sacadas del refri hace magia en la masa.
- Naranja fresca: Usa la ralladura de una o dos, le da chispa a todo.
- Harina: Dos tazas común, la de siempre, sin misterio.
- Mermelada de arándano: Alrededor de media taza, la que más te guste.
- Mantequilla: Una taza fría cortada en cubitos, para que la masa salga hojaldrada.
- Crema ácida: Un cuarto de taza hace la masa mucho más suave.
- Sal: Solo una pizquita para realzar sabores.
- Huevo: Uno batido, para darte ese color dorado bonito arriba.
Manos a la Masa
- Último Toque
- Pinta cada uno con huevo, espolvorea azúcar, mételos al horno hasta que se pongan doraditos. El aroma es una pasada.
- Enrolla Sin Miedo
- Corta la masa en triángulos y enrolla del lado ancho al más estrecho. Me encanta cómo quedan al final.
- Hora de Rellenar
- Unta la mermelada, pon las nueces y termina con ralladura de naranja encima.
- Forma los círculos
- Divide la masa y estira cada porción en un círculo usando un plato de cena para que salgan parejos.
- Que Descanse
- Envuelve la masa en plástico y guárdala en frío. Puedes aprovechar para preparar un té y tostar las nueces.
- Masa en Marcha
- Mete la mantequilla y la harina fría en el procesador de alimentos hasta que parezca arena húmeda. Luego añade queso crema, sal y crema ácida, pulsa hasta formar una masa desordenada.

Trucos de Mi Cocina
Lo importante es que todo esté bien frío, hasta la harina a veces la meto al refri. Si pones un poco de harina sobre la mesa la masa no se pega y puedes cortar las piezas bonito. La ralladura recién hecha es lo que marca la diferencia.
Que Te Duren Así de Buenas
Se mantienen perfectas en un recipiente unos cinco días. Yo las dejo en la encimera y congelan súper bien también. A veces hago el doble y guardo para visitas sorpresa.
Para Que Se Vean Increíbles
Me encanta ponerles azúcar glass por encima y servirlas en la bandeja de mi abuela. El contraste del azúcar y el dorado queda de lujo en cualquier mesa navideña.
Juega con los Sabores
Cranberry-naranja es mi favorita, pero me gusta inventar. Albaricoque con almendra queda espectacular y frambuesa con chocolate negro, ya ni digas. Prueba lo que se te antoje.

Estrella del Intercambio
Siempre destacan en los intercambios. Esas vueltas bonitas y el relleno distinto hacen que todos me pregunten por ellas. Llevo copias impresas para repartir porque nunca fallan.
Dulces Recuerdos en Casa
Ya es tradición en casa hacer estos rugelach en las fiestas. Llenamos la cocina de cuentos y carcajadas enrollando y poniendo azúcar juntos. Esos ratos son todavía más dulces que las propias galletas.
Mucho Más Que Un Dulce
Cada vez que hago rugelach pienso en toda esa gente que cocinó antes que yo. Aunque parece complicado, es más bien cariño y buenos ingredientes. Me llena enseñar a otros, igual que hizo mi vecina conmigo.
Pareja Perfecta
Me gusta mucho acompañar estos bocados con mi té de la tarde, uno tipo chai especiado o un té negro suave. Vas platicando con amigos y no te das cuenta cuánto has comido. Las capas quedan perfectas con bebidas calientes.

El Rollo Perfecto
No pasa nada si los primeros no quedan bonitos. Yo uso una espátula finita para ayudarme si la masa se pega. Hazlo con calma, pronto te salen perfectos y sin esfuerzo.
Opciones Para Todos
Cuando vienen mis amigos que no pueden con el gluten, uso mi mezcla de harina sin gluten preferida. El queso crema sigue dejándolos suaves y así nadie se queda con las ganas.
Cocinar con Peques
Mis nietos la pasan bomba ayudando con estas galletas. Les toca poner las nueces y el azúcar arriba. Si se hace un lío, mejor, esas risas lo valen todo.
Dar Con Cariño
Estos dulces son el regalo más bonito. Los envuelvo en cajas lindas con lazo y ver la carita de quien los recibe es lo máximo. Nada se compara con regalar algo hecho en casa.

Un Toque de Luz Extra
De vez en cuando, mezclo ralladura de naranja directo a la masa o les echo glaseado por encima. El cítrico hace que todo brille y se nota desde la primera mordida.
Masa Fría, Corazón Feliz
El secreto está en una masa fría. Cuando los trocitos de mantequilla se derriten en el horno forman esas capas espectaculares. Aguanta las ganas ¡vale la pena!
Para Fiestas Grandes
Si viene toda la familia hago el doble o triple de masa. Cambio los rellenos para que todos encuentren su favorito. Y si sobran van al congelador para otro día.
Cuenta Tu Propia Aventura
Si te quedas con el clásico de arándano y naranja o haces tus mezclas, lo divertido es preparar algo especial. Cada vez hay historias nuevas para contar y recuerdos para guardar.

Preguntas Frecuentes
- → ¿Puedo preparar la masa con anticipación?
Claro, envuélvela bien y refrigérala toda la noche. Así puedes dividir el trabajo en dos días.
- → ¿Qué pasa si no tengo batidora de inmersión?
Un licuador normal funciona igual de bien para triturar la mermelada. Solo ten cuidado al procesar líquidos calientes y deja que enfríe un poco antes.
- → ¿Puedo usar mermelada comprada en la tienda?
Aunque la mermelada casera tiene mejor sabor, puedes usar mermelada de arándano comprada. Añade ralladura de naranja para realzar el sabor cítrico.
- → ¿Por qué mis rugelach se desarmaron al hornear?
Asegúrate de no extender el relleno demasiado cerca de los bordes y enrolla la masa firmemente desde el extremo más ancho. Enfriar las galletas formadas antes de hornear también ayuda.
- → ¿Se pueden congelar estas galletas?
Sí, se pueden congelar hasta por 3 meses. Congélalas una vez horneadas y completamente enfriadas. Descongélalas a temperatura ambiente antes de servir.