
Hoy me lanzo a preparar unos sabrosos rollitos de carne al estilo italiano, los famosos involtini. Imagínate esta delicia rellena de jamón curado, albahaca fresca y mucho parmesano, perfecta para compartir en una noche especial. De verdad, es como viajar a Italia sin salir de casa y a todos les encanta.
Por qué son únicos
Lo que más me gusta de los involtini es que puedes jugar un montón con ellos. La carne suave y ese relleno potente más la salsa cremosa hacen que nadie se quiera perder el plato. En mi casa nunca faltan, ya sea para Fiestas o una cena tranquila en familia.
Qué necesitas
Yo busco 4 filetes bien finos, jamón serrano (el de toda la vida), bastante albahaca fresca y unos 50g de parmesano rallado de verdad. Para sellarlos, un poco de aceite de oliva y una pizca de mantequilla. La salsa se arma con vino blanco, crema de leche y un poco de caldo de verduras, espesada con un toque de maicena que le queda genial.

Así te salen bien seguros
Empiezo aplastando los filetes para que queden bien finitos y los salpimiento. Encima pongo el jamón, la albahaca y el parmesano. Los enrollo con cuidado y los amarro con hilo. Van a la sartén (profunda) con aceite y mantequilla hasta que doren por fuera. Luego echo el vino y al ratito sumo la nata y el caldo. Los dejo cocer a fuego bajo unos 25-30 minutos y quedan súper tiernos.
Qué les pongo al lado
Me fascina acompañarlos con pasta tipo tagliatelle para que todo se mezcle en la salsa cremosa. Un poco de ensalada verde con vinagreta redondea el plato. Y si recibo visitas, saco unas verduras asadas o aceitunas aliñadas mientras charlamos antes.
Mis trucos favoritos
El truco está en cocinarlos suave y sin prisas, así se ponen blanditos. Solo uso ingredientes frescos: parmesano recién rallado y albahaca del mercado. Antes de servir, siempre echo un trocito de mantequilla en la salsa para que quede súper cremosa.
Manera práctica de adelantar
Una de las cosas que más me salva es que puedo dejar los rollitos listos el día anterior. Los enrollo y directo a la nevera. Solo los tengo que dorar y hacer la salsa antes de servir. Y si sobran, al día siguiente están hasta más buenos.

Cómo los cambio a mi gusto
Me divierte variar el relleno de vez en cuando. Unas veces meto tomates secos o aceitunas para que queden más mediterráneos. Con mozzarella se sienten más cremosos y si añado espinaca fresca se ponen súper coloridos. Para amigos veggies, los lleno de verduras asadas y un poco de queso feta.
Salsa insuperable
Para mí, la salsa es lo que marca la diferencia. Si le echo orégano y tomillo frescos queda con mucha más onda. Unas gotas de zumo de limón la hacen viva y un poco de nuez moscada suma sabor. Si la quiero más ligera o muy cremosa, ajusto sobre la marcha.
La sartén importa mucho
Mi secreto es usar una sartén gruesa y pesada. Tengo una de hierro fundido que reparte el calor de lujo. Así se doran genial y los juguitos que sueltan hacen que la salsa quede muy intensa.
El vino que elijo
Con los involtini me va genial un Pinot Grigio seco o un Chianti ligero. Se mezclan bárbaro con los sabores italianos. Si prefiero algo sin alcohol, preparo un zumo de uva con burbujas.

Un toque de Italia
Estos involtini me saben a pura tradición italiana. De cosas muy sencillas sale un plato que sorprende. Da igual si los hago clásicos o me invento una versión, siempre le dan alegría mediterránea a mi mesa.
Preguntas Frecuentes
- → ¿Qué carne es la más adecuada?
El cerdo y la ternera funcionan muy bien. Asegúrate de que sea carne tierna y cortada en piezas finas.
- → ¿Puedo preparar los rollitos con anticipación?
Es posible preparar los rollitos antes y cocinarlos más tarde, pero la salsa queda mejor si la haces al momento.
- → ¿Por qué es necesario que cocinen a fuego lento?
Cocinar lentamente garantiza que la carne quede blanda. Si se cocina a fuego fuerte, puede quedar seca y dura.